Estoy con Chomsky tomando un helado en Munchi´s. Hace frío. Lo sé. También estoy ansiosa porque en cinco minutos se estrena la nueva película en cinco partes de Wes Anderson. Pero él dice que está harto de tanto academicismo y que a veces necesita dejarse llevar por un rico sambayón. Chomsky tiene unos guantes tejidos un tanto desprolijos y la gente lo mira raro pero yo no hago caso y camino a su lado feliz, como si fuera mi abuelo. Nos sentamos en una mesita de lo más divina y charlamos sobre la importancia del color verde en la ropa. -En la nueva película de Wes Anderson hay mucho verde -comento. -¡Ese muchacho, ese muchacho! Abro un diario y veo el titular: “Hoy se estrena en cinco salas la nueva obra de Anderson. Podrá verse en continuado, respetando la historia”. La primera parte se llama: “Jean Piaget, obra en demolición. El comienzo de la A”. La segunda parte: “Jean Genet y el gazpacho orgánico”. La tercera parte: “El amor como aventura: La hija de Piaget conoce al hijo de Genet”. La cuarta: “El sonambulismo. Una obra de teatro”. Y la quinta y más ambiciosa porque dura cinco horas, doce minutos: “Epílogo”. La idea es que la gente pase un día entero en el cine, conviviendo con estos personajes. Lo curioso es que “Epilógo” se estará terminando mientras todos vemos “Jean Piaget” y será protagonizada por esa chiquita sobrevaluada, la Ellen Page, quién ayer a la noche le dio el sí a Wes. -¿Por qué no te gusta ella? -Bah, se cree que es la gran cosa. Chomsky suelta una risotada y todos se vuelven para mirarnos. Él es enorme. Debe medir casi dos metros. Y tiene una risa con cuerpo. -Hagamos una cosa, compremos unos caramelos en el kiosco de la esquina y vayamos a ver de qué se trata todo esto.
Me gusta el final, en serio deberías de probar a escribir algo mas largo. No se te daría nada mal
Tengo tres novelas encajonadas y una a medio escribir. Me da pudor mostrarlas. Algún día… Algún día.
Como sea, muchas gracias.